sábado, 29 de junio de 2019

OLAS SUAVES






                Me abrazó ,en la playa , el viento,

llenando mis labios del perfume de las algas.

mientras, la mar humedecía mi rostro,

el sol calentaba-apenas-mi cansado cuerpo

y la carretera lejana, con su rumor,

me hacía añorar el silencio.



                Olas suaves, otras bravías

rompían en la arena

por huellas surcada, que iban y venían

buscando-tal vez huyendo-de su destino.

Pequeños guijarros se movían

como güijas intentado dar un mensaje.



                Todo el mar era mío

y agradecí  a Dios tan generoso regalo,

ajeno a las tormentosas olas

que-otrora-pudieran ser mi enemigo.

Respiré a fondo. Me sentí lleno de la mar

y, en mi oídos aún escuchaba

el susurro de la caracola

diciéndome quedo: "no te vayas, no te vayas”



                Y allí seguí; fija la mirada

haciendo también mío el horizonte,

mientras las lágrimas fluían por mi rostro

hasta fundirse con la mar
que bañaba mis pies.

miércoles, 26 de junio de 2019

LA COMPRA




                    


            Cuando entré al supermercado

tuve una gran alegría.

Los precios habían bajado,

la calidad mejorado

y, de todo lo que necesité, había.



            Y vi, además, ya les cuento,

que hasta tuve aparcamiento;

que tan solo en un momento

llené el carro de alimentos

¿no resultó portentoso el día?



            Más aún; fueron amables

en el trato, diligentes

y, hasta-diría-

que, desde el primer momento

en aquél establecimiento

supieron lo que quería.



            Sólo encontré un fallo,

pues quise comprar rodaballo

más, fresco , no lo tenían.

Sus ojos estaban muertos,

secos como los de un tuerto

y creo que-hasta-olía.            


            Así, que cambié de menú

y compré los complementos

para hacer un suculento

plato de arroz con lentejas

que, ya se sabe, las tomas

o, si no quieres, las dejas.



            Para el postre yo pensaba

en una tarta ,de fresa

tal vez nata o chocolate

más, me llevé la sorpresa

al ver ,en la etiqueta impresa,

su caro precio ¡un dislate!



            Volví la mirada al estante

en que estaban las cerezas

y me llevé otra sorpresa

de lo más acongojante,

pues con toda mi cartera

mi dinero apenas era,

para pagarlas, bastante.



            Rota la impresión primera,

tornose en disgusto la alegría.

Salí de allí con la cartera vacía

y, lo que es más importante,

mi compra hasta daba pena,

pues sólo una berenjena

tenía para comer; la cena

era un pequeño tomate

y, para desayunar, tenía

un mendrugo que parecía

un trozo de papel secante.

viernes, 21 de junio de 2019

AL ALBA








Al alba me desperté;

Entre mis brazos dormías.

Tus labios eran de grana,

Tu rostro, cual faz divina

Reflejaba el sufrimiento

Por el dolor que sentías.



                Te estreché en fuerte abrazo.

Al sentirte protegida

Tu rostro se tornó sereno

Y tu respiración tranquila.



                En nuestra ventana, el sol

Alegre anunciaba el día.

martes, 18 de junio de 2019

QUISE AMAR






                Amar a Dios quise un día

en que solo me encontraba

más , nunca le vi ni hallé

aunque a muchos preguntaba.



                Un anciano me alumbró;

con su voz vieja y cascada

abrió en mi corazón

una grieta que se agranda,

pues sus palabras hollaron

lo más profundo de mi alma.



                ¿Amas a alguien?, me dijo.

¿Amas al que ves a tu lado?

Nunca a nadie yo amé;

nada ni nadie he amado

respondí, muy extrañado.



                ¿Cómo quieres a Dios amar,

si no siquiera has pensado

que para amar a quien no ves

antes debes amar a tu hermano?

sábado, 15 de junio de 2019

DIOS








                Dios está en la Madre Tierra

y en las florecillas del campo;

también recorre el camino

que nos lleva al camposanto

donde reposan los cuerpos

cuando la vida dejamos.



                Dios está siempre cercano;

también junto a aquel enemigo

a quien nada yo demando

sino la paz, el abrigo

de un abrazo apretado,

lejos del odio y del miedo,

sintiéndole como hermano.



                Dios renace con el día

como la flor en primavera;

nos llena Dios de esperanza,

de eso que es hoy quimera,

pues nadie cree si no ve,

nadie su amor entrega;

nadie tiene otra fe

que el poder y la riqueza.



                Dios me espera cada día;

su puerta siempre está abierta.

A veces, a ella me asomo,

otras quisiera no verla

por no sentir su mirada,

por no escuchar su respuesta,

por no saber de su amor,

por no llorar mi vergüenza

por no responder al hermano
con mi mano siempre abierta.

miércoles, 12 de junio de 2019

PAZ






Dame Paz, Amor y Vida

que se traduzcan

en luz en mi mirada,

que mis ojos siempre luzcan

con el amor

que da su vida y se derrama.



                Dame el Amor y el sentimiento

de formar un todo

con mi hermano,

de mío hacer su sufrimiento,

de vivir una vida sin engaños.



                Dame la Vida porque sienta

dentro de mí tal sentimiento

que parar un momento nunca pueda

sin sufrir ese instante gran tormento.



                Dame Paz que, generosa,

se transmita hoy en mi vida,

que mi alma de ella albergue tanto

que dar pueda sin perderla

ni sufrir ,con su entrega , menoscabo.


domingo, 9 de junio de 2019

QUIERO OLVIDARTE








¡Cuánto ha que nada siento!

¡Cuántos momentos perdidos

por no guardar en el alma

otra cosa que el olvido!



                Cerré mis ojos a todo;

mi alma quedó sepultada

por sus angustias y miedos

mientras, esos ojos lloraban

y mi corazón se desgarraba.

¡Cuánto ha que nada siento!



Me sentí pobre y mezquino.

Miraba hacia otro lado

mientras tu sufrías, hermano.

Hice callar a mi alma,

dejé mi corazón sin latidos

y, hasta mi boca cerré,

para no exhalar ni un suspiro.

¡Tan sólo quiero el olvido!



                Ahora, miro siempre a lo lejos

por si te veo acercarte.

Lo hago para esquivarte

y, si te acercas y te miro,

quizá te recuerde-amigo-

cuando te tenga delante.

¡Lo que quiero es olvidarte!



                ¿Quieres un abrazo de amigo?

¿Quieres tus cuitas contarme?

Mejor… no te pongas delante

porque tiempo no me queda

para escuchar hoy tus penas

y, aunque tenga que odiarme,

¡lo que quiero es olvidarte!



                Sé que me arrastro, vencido,

hacia un abismo insondable.

Sé que mis sueños han muerto

entre mis manos culpables.

Sé que nada merezco

y me reconozco cobarde.

Por eso, tal vez por eso,

¡lo que quiero es olvidarte!

jueves, 6 de junio de 2019

SIENTO RABIA








A veces siento rabia…

Me siento impotente, pequeño.

No puedo evitar que se caiga

aquel edificio longevo,

aquélla placeta gozosa

donde se cumplían mi sueños

hoy, por abandono y desidia

hechos escombro en el suelo.



                Así se está perdiendo el pasado.

Pronto, el cemento, los muros,

los cristales y el asfalto

cubren con el olvido

los bienes que nos legaron,

historia viva del tiempo.

Tesoro guardado en vano.



                Es la ciudad fría, triste.

Ningún recuerdo de antaño.

Bloques fríos de cemento,

acero, cristales tintados.

Quizá un nuevo aparcamiento

sobre la jungla de asfalto.



                Apenas cuatro matas verdes,

árboles secos y cardos

en una triste rotonda

o en aquél seto lejano,

donde sólo acuden los perros

para dejar su legado.



                ¡Cuánto añoro mi ciudad,

ahora, que soy anciano!

Quisiera recordar

aquéllos días, antaño,

aquélla plaza y lugar

donde, de niños, jugamos.

sábado, 1 de junio de 2019

EN LA MAR






Dejadme descansar en la mar,

pero dejadme sin prisa,

que la mar me ha de llevar

a galope de la brisa.



                Dejad que las olas me arrullen,

que me corone su espuma

mientras me sumerjo en sus aguas

en pos de una nueva vida.



Y, si queréis ser mi escolta,

que una lágrima furtiva

se venga conmigo a la mar

para hacerme compañía.



                Volved un día a la playa,

donde las olas baten la orilla.

Castillos de arena y sal,

algas que están dormidas

entre sueños os dirán

lo bella que fue mi vida.



                Que no acabó en un momento

ni fue un tormento vivirla;

que me fui sin un lamento

por disfrutar, por sentirla,

por ese amor que fue nuestro.

Fuente de gozo y de dicha.