Culpables, lo somos todos.
Somos todos y ninguno
pero siempre, cada uno,
siente culpable a los otros.
Somos todos y ninguno
pero siempre, cada uno,
siente culpable a los otros.
Si fracasamos, la culpa
la tienen las circunstancias
que parece que se aúnan
para dar el golpe de gracia.
la tienen las circunstancias
que parece que se aúnan
para dar el golpe de gracia.
Si el éxito nos sonríe,
sólo a nuestra pericia se debe
aunque, a veces, si sucede,
no es por el esfuerzo de nadie.
sólo a nuestra pericia se debe
aunque, a veces, si sucede,
no es por el esfuerzo de nadie.
Y cuando el éxito, merecido,
se esgrime como resultado
del esfuerzo y buen sentido,
siempre es considerado
por quienes te han envidiado
como algo natural y sencillo.
se esgrime como resultado
del esfuerzo y buen sentido,
siempre es considerado
por quienes te han envidiado
como algo natural y sencillo.
Estupendo. Te felicito una vez mas porque te nace poetizar los sentimientos.
ResponderEliminar